El cupping es un antiguo método terapéutico que emplea la Medicina Tradicional China desde hace más de 3.000 años. Consiste en aplicar tazas o vasos a modo de ventosas sobre determinados puntos energéticos del cuerpo descritos por la Acupuntura. Hoy en día ya no es necesario recurrir a tazas como en su origen, sino que existen ventosas de diversos modelos: de silicona, de vidrio, con vacio, con pera...
Los chinos y los egipcios la usaron, e Hipócrates y Galeno fueron defensores de sus numerosos beneficios. En Europa y América los médicos empezaron a utilizarla a principios del siglo XIX y desde entonces ha venido confirmándose clínicamente lo que la observación había mostrado desde hace más de tres milenios: que el cupping (de cup, "taza" en inglés) o "terapia de las tazas chinas" aporta numerosos beneficios, tanto físicos como psíquicos.
Este tipo de masaje es uno de los que más empleo como complemento a una sesión de acupuntura debido a su gran sencillez y a los rápidos resultados que produce. Me ha sido de gran utilidad aplicado sobre el dorso para tratar problemas musculares tales como contracturas o tensiones excesivas. Otra de las aplicaciones más útiles que le conozco es la drenante. Tras aplicar electroacupuntura sobre, por ejemplo, la zona abdominal para romper las células de tejido adiposo (electrolipólisis), aplico un masaje drenante con la ventosa, haciendo resbalar ésta con una crema anticelulítica.
Al crear succión o presión negativa, el masaje con ventosas es usado para drenar el exceso de líquidos y toxinas; estimular el sistema nervioso periférico; provoca la circulación de la sangre estancada en los músculos y la piel; suelta las adhesiones, tejido conectivo y los molestos nudos en los tejidos blandos.
La sensación de las ventosas se caracteriza por un calor profundo y un hormigueo aún mucho después de cuando se termina el tratamiento. Las ventosas nos son irritantes para la piel o el cuerpo. Saca la inflamación, no agrega. El masaje con ventosas es usado en toda el área de la espalda, la cual es una magnifica adición a cualquier masaje. El tratamiento es sedante, y la gente llega a una sensación profunda de relajación. Las copas mas grandes se usan en la espalda; un vació grande simula la acción de un masaje en tejido profundo. El movimiento puede ser largo y de descarga, o circular y estimulante, para las áreas de los molestos nudos y áreas de tejido rígido.
La piel se enrojece con un masaje fuerte con ventosas, indicando que la circulación ha sido llevada a la superficie. La aplicación de linimentos, analgésicos o aceites esenciales inmediatamente después del tratamiento con ventosas permite una mejor absorción hacia los tejidos. El incremento de la circulación de la sangre alimenta los músculos y piel y permite que las toxinas sean drenadas. Conviene advertir al paciente que muy posiblemente tras finalizar la sesión se lleve "de recuerdo" algún pequeño hematoma leve debido a la succión. No resultará doloroso y le desaparecerá en uno o dos días.
Este tipo de masaje está indicado, entre otras afecciones, para lo siguiente:
Motilidad intestinal disminuida o alterada.
Linfa estancada y edemas.
Circulación deficiente.
Dolores musculares.
Dolor tipo ciático.
Celulitis.
Estado de ansiedad y nerviosismo.
Acciones del masaje con ventosas:
Elimina el estancamiento sanguíneo y reduce la inflamación.
Drena y mueve líquidos orgánicos.
Seda el sistema nervioso.
Estira los músculos y el tejido conectivo.
Suelta las adhesiones.
Suministra sangre a la dermis y limpia toxinas de la misma.
Activa la circulación de la sangre.
Mejora el funcionamiento de las articulaciones.
Por su efecto drenante, también se emplea en el masaje facial y corporal.
También puede usarlo el profesional de la acupuntura para masajear el recorrido de un meridiano afectado o para estimular mediante succión aquellos puntos que considere oportuno.
0 comentarios:
Publicar un comentario